La influencia demoníaca es la acción extraordinaria de un espíritu maligno sobre un ser humano sin
llegar al grado de la posesión.
La influencia puede ser interna, oyendo voces, teniendo pesadillas o despertando sin causa aparente,
sintiendo enfermedades o dolores sin causa natural, o sentimientos de depresión o de obsesión
psicológica.